Hoy, todos somos verdes.

Como si de un retablo de las maravillas se tratara, los diferentes partidos se aprestan a prometer a los votantes cosas que ni ellos mismos se las creen.

Lo que toca hoy es vender lo verde.

LOS VERDES DE MADRID llevan más de 20 años defendiendo su apuesta ecológica en lo medioambiental, y la transparencia y la participación real en la política municipal.

Pero, por arte de magia, aparecen inventos electoralistas como el de IU-Los Verdes, que no se explican si no es por una manifiesta intención de confundir al electorado:

Para quien quiera votar a IU no cabe error: optará por la papeleta de IU-Los Verdes. Pero para los votantes no advertidos de LOS VERDES DE MADRID cabe el error más que probable de pensar que esta vez Los Verdes de siempre en Arroyomolinos acuden en coalición con IU.

De este modo, Los VERDES DE MADRID perderán unos votos que les corresponden, y se los llevará IU tan ricamente.

Por encima de que prosperen o no los recursos ante los tribunales, lo que queda cada vez más claro es que el veredicto de unos ciudadanos bien informados es lo único que puede tener un futuro político que valga la pena.

Y es que en estos comportamientos es donde realmente se ve la honradez o la catadura de unos y de otros.


Santiago Fernández Pérez